Duda razonable, la confusa
XLIV Hace ya algún tiempo, acaso meses, pero seguro estoy de que no ha pasado más de un año, escucho con frecuencia la expresión duda razonable . Quizá se debe a que vi un documental que tiene por título dicha expresión o a que veo con frecuencia seriales y películas norteamericanas en los que siempre aparecen policías y ladrones, todos con las mismas mañas y las mismas expresiones, incluida la de marras. La primera vez que reflexioné sobre esta frase me pareció más o menos entender la intención de su uso; no obstante, con la multiplicación de contextos en que la utilizaban los personajes televisivos y los abogados de Tabasco (estado donde sucedió esa atroz injusticia que se narra en el documental antes referido) la confusión empezó a enseñorearse de mi pensamiento, y como creo que lo mismo le puede suceder a nuestros lectores, pues me he dado a la tarea de expresar algunas opiniones sobre el sentido de dicha frase así como el uso que se le da. Como toda fórmula lingüística, e...